El papayero es un árbol frutal de origen americano, probablemente de los Andes peruanos o de Mesoamérica, aunque cultivado desde tiempos inmemoriales desde México a Bolivia y Argentina. El género Carica deriva del nombre griego de la higuera común, karike (Ficus carica), y le fue dado por C. Linneo por la semejanza entre sus hojas. El nombre común 'papaya' es una adaptación del nombre maya páapay ya que significa 'zapote jaspeado'. En náhuatl se le conoce como chichihualtzapotl, 'zapote nodriza', y su fruto está vinculado con la fertilidad.

Una curiosidad botánica es que, a pesar de su porte arbóreo, se trata realmente de una herbácea gigante (puede llegar a los 10 metros), como demuestra su tronco, por lo que podría decirse que es en realidad una "verdura arborescente". Otra curiosidad es que puede ser dioica o monoica: es decir, podemos encontrarnos con pies que presentan flores femeninas, otros con flores hermafroditas y otros con flores masculinas. Bajo sus hojas nacen los frutos, grandes y carnosos, con las semillas en su interior.

La papaya se consume como fruta fresca o elaborado, incluso estando inmaduro se consume en muchos países como una verdura. Curiosamente su látex (savia) puede ser tóxico en estado natural, y es rico en papaína, enzima utilizada en la industria de la alimentación, cosmética y farmacopea.